viernes, 21 de febrero de 2014

El verdadero amor.

Estoy enamorada de un hombre que me da cachetadas y en ocasiones patadas, que no me deja dormir hasta que él quiera dormir y mucho menos despertar a la hora que yo quiera, estoy enamorada de un hombre que me grita por no tenerle la comida lista apenas le da hambre, un hombre por el que no puedo salir porque siempre tengo que estar disponible para él y que cree que por darme una sonrisa tiene derecho a manejarme a su antojo, pero lo más increíble es que este hombre apenas pese 6 kilos y mida 60 cm, y si, por una sonrisa suya tiene derecho a todo sobre mi porque su sonrisa ilumina mi mundo, porque no importa despertar temprano en la mañana si me encuentro con esos ojos mirándome y esa sonrisa de agradecimiento, porque sus cachetadas y sus patadas sólo reflejan que se quiere acercar a mi, y sus gritos cuando tiene hambre reflejan lo débil, vulnerable y sobre todo cuanto necesita de mi, porque verlo dormir en mis brazos me da la paz más enorme que jamás he sentido, porque cuando llora de dolor me duele el alma y quisiera curarle todo, porque sin necesidad de que me hable sé lo que necesita y sé que haría todo por dárselo, porque hacerlo feliz es la nueva razón de mi vivir. Estoy enamorada de el mejor hombre que Dios me pudo regalar, y no lo cambiaría por salir todos los fines de semana a bailar. Estoy perdidamente enamorada de mi hijo.